Noticias de Gran Bretaña
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Ahora me pregunto, si Escocia, por ejemplo, termina independizándose, podría reclamar que se les transfiera algún navío o avión, así como se repartieron Rusia y Ucrania la flota del Mar Negro.
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ESCOCIA: El SNP aspira a una mayoría independentista para exigir otro referéndum
Hoy la mitad de los escoceses son partidarios de romper la unión con Inglaterra, pero económicamente es mucho más difícil
EL PAÍS - RAFAEL RAMOS - EDIMBURGO. CORRESPONSAL - 05/05/2021
El momento idóneo para la independencia de Escocia habría sido quizás en los años setenta, cuando se descubrió el petróleo en el mar del Norte, y todo el dinero se podría haber dedicado a un fondo soberano como el noruego en vez de a financiar la desindustrialización impuesta por Thatcher, el desempleo y el gasto social que provocó. Pero entonces el soberanismo ni siquiera existía. Hoy la mitad de los escoceses son partidarios de romper la unión con Inglaterra, pero económicamente es mucho más difícil.
La joya de la corona del superjueves en Gran Bretaña (elecciones municipales y autonómicas) es Escocia, donde la victoria del SNP está cantada a pesar del divorcio entre Nicola Sturgeon y Alex Salmond, de la creación de un segundo partido independentista minoritario (Alba) que le puede restar votos, de los caramelos ofrecidos por Boris Johnson a cambio de seguir en el Reino Unido (inversión en infraestructuras) y de las historias de terror divulgadas por los unionistas sobre la ruina económica y marginación política de un divorcio.
Pero la cuestión es por cuánto ganará el SNP, si con una mayoría
absoluta, o con una mayoría indepe sumados los apoyos de Alba y los Verdes (sus actuales socios de coalición), y si la utilizará (es casi seguro) para desafiar a Londres, exigir un nuevo referéndum antes del 2023 y desatar la mayor crisis constitucional en un siglo.Johnson pretende ganar tiempo, y mientras tanto reeditar la campaña del no en el 2014, y convencer a un número suficiente de electores de que la independencia sería un desastre económico, y más ahora que el petróleo ya no se cotiza a cien dólares el barril como hace siete años. Su planteamiento es que cada escocés está “subvencionado” del orden de 1.900 euros por Westminster, que paga cuatrocientos euros menos en impuestos, que un 60% del comercio del país es con Inglaterra (cuatro veces más que con la UE), que la separación significaría una pérdida del 8,7% de los ingresos por barba, y que el déficit público de casi el 10% del PIB es insostenible y sería castigado sin piedad por los propietarios de fondos. La única alternativa para sobrevivir como nuevo Estado sería una subida masiva de impuestos o una austeridad sin precedentes.
El SNP es consciente de la incertidumbre económica que plantea la independencia, y que fue el factor decisivo en la derrota del 2014, pero cuenta con que los votantes se han vacunado de tanto negativismo y van a estar dispuestos a pagar un precio razonable por la ilusión de tener su Estado. Que la cuestión identitaria va a primar sobre el bolsillo. Y que catorce años consecutivos de gobierno han convencido a la gente de que Edimburgo defiende sus intereses mejor que Londres (un 73% aprueba la gestión de Sturgeon durante la pandemia).
Los dos grandes desafíos a los que necesita encontrar respuesta el independentismo son la moneda y la frontera. La idea de seguir una década con la libra esterlina dejaría su economía en manos del Tesoro inglés (si es que aceptara el trato), y la eventual integración en la UE (si lo permiten España, Italia, Francia y demás) crearía problemas de controles aduaneros y tráfico de mercancías que dejarían pequeños los que se registran actualmente en el Ulster. Hasta el siglo XVIII, la región fronteriza con Inglaterra fue una especie de salvaje oeste, un territorio de bandidos y ladrones de ganado, fuertes y torres de vigilancia. El Scexit no reconstruiría ese pasado pero crearía problemas.
El SNP se ha convertido en la última década y media en una especie de partido único en Escocia, habiendo incorporado a su causa a cientos de miles de antiguos votantes laboristas (muchos descendientes de emigrantes asiáticos o trabajadores de los astilleros e industrias pesadas) desencantados con el giro al centro en tiempos de Blair y la guerra de Irak. El nuevo líder del Labour, Anas Sarwar, hijo del gobernador de la provincia pakistaní de Punjab, ha doblado su popularidad en los dos meses que lleva en el cargo, y amenaza con arrebatar a los tories la posición de segunda fuerza legislativa. Pero le queda un larguísimo trecho por recorrer.
Los nacionalistas han realizado en sus tres mandatos consecutivos notables logros. En Escocia no se pagan peajes, ni la universidad, las guarderías, las medicinas, el dentista, las comidas para alumnos de primaria y la atención a los ancianos son gratis, durante la pandemia han estado congelados los desahucios, los salarios de los funcionarios públicos han aumentado de acuerdo a la inflación y los del personal sanitario, un 4%. Es un país con un espíritu colectivista y socialista al que le gusta compararse con Dinamarca y querría ser la Nueva Zelanda europea, progresista, respetado y objeto de admiración. Pero también tiene graves problemas, como el deterioro de la sanidad y educación públicas, las drogas, el analfabetismo, la baja expectativa de vida, muchos de ellos consecuencia aún de la urbanización masiva durante de la revolución industrial y el crecimiento desbordado entre 1760 y 1830, que superó las infraestructuras y generó una insalubridad que no se ha podido remediar por completo.
“Tenemos que vivir y actuar como si ya fuéramos independientes, con la ilusión de un país que acaba de nacer”, dice Nicola Sturgeon, artífice (junto con Alex Samond) de la construcción de un nacionalismo atípico socialdemócrata, de centro izquierda, pro inmigración y antiarmas nucleares, que se comporta más como un movimiento que como un partido, capaz de desafiar las reglas de la gravedad política y mantenerse en el poder. La cuestión es qué hará cuando Johnson le diga que no a un nuevo referéndum. Cada vez tiene más partidarios la vía catalana de una consulta no sancionada que desafiaría a Londres y a la UE, y podría ser boicoteada por el bloque unionista. Su esperanza es que el órdago no acabara de la misma manera.
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ESCOCIA: Clara victoria de los independentistas en las elecciones regionales
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Tarde o temprano Escocia encontrara su camino al igual que Irlanda
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Nicola Sturgeon que es la Primer Ministro de Escocia tuvo 64 representantes y la mayoría absoluta se consigue con 65, le faltó uno, pero, hay otros partidos que también apoyan la independencia, Solidaridad y el Partido Verde y el Partido Socialista Escoces.
El 62% de los escoceses votó en contra de la salida del Brexit, así que ese debe ser el piso de los que votará por el SI. -
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Frustración tras el Brexit, cinco años después del referendum del Brexit
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La factura que deberá pagar el Reino Unido asciende a € 47.500 millones por el Brexit
El RU lo niega y dice que son entre 41.000 y 45.000
Bruselas y Londres discuten pago de la factura del Brexit.
La Comisión Europea (CE) advirtió que su cálculo del monto de la factura que deberán abonar los británicos por el Brexit es definitivo, después de que la Unión Europea ( UE) y el Reino Unido anunciaran estimaciones muy diferentes sobre el saldo a pagar.
La UE anunció el 30 de junio que la factura total ascendía a unos 47.500 millones de euros, una suma que Reino Unido debería sufragar durante varios años, pero el Gobierno británico afirmó a través de un voceo que su cuenta es de entre 35.000 y 39.000 millones de libras esterlinas, equivalente a entre 41.000 y 45.000 millones de euros.
La discrepancia se encamina a convertirse en nuevo escollo en la relación entre los antiguos socios.
Cumplimiento
Balazs Ujvari, uno de los voceros de la CE, dijo que la primera cuota de la factura británica, de 6.800 millones de euros, fue pagada por Londres a tiempo y en su totalidad.Sin embargo, al referirse al valor total estimado por la UE, insistió en que "el informe es definitivo", y añadió que "los cálculos se realizaron basándonos en el acuerdo de retirada", según consignó la agencia de noticias AFP.
El vocero europeo dijo que la cuenta asciende "a 47.500 millones de euros, que el Reino Unido tendrá que pagar al presupuesto de la UE en el transcurso de los próximos años".
En Londres, un portavoz británico apuntó que "la estimación del Gobierno del Reino Unido del valor de la liquidación financiera neta permanece en el rango central de 35.000 a 39.000 millones de libras".
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Gran Bretaña perdió la Eurocopa frente a Italia 3 a 2 por penales
https://www.ole.com.ar/futbol-internacional/eurocopa-2016/italia-derroto-penales-inglaterra-consagro-campeon_3_oYTcpFIiu.html -
UE descarta renegociar protocolo sobre Irlanda del Norte
El protocolo fue arduamente negociado y actualmente es fuente de gran tensión y amenaza con provocar una gran crisis política en Reino Unido.
El vicepresidente de la Comisión Europea, Maros Sefcovic.Londres pidió más temprano introducir “cambios significativos” al acuerdo, ya aprobado por el parlamento británico, algo que Bruselas no ve con buenos ojos.
Irlanda se atiene al acuerdo
El protocolo fue arduamente negociado y actualmente es fuente de gran tensión y amenaza con provocar una gran crisis política en Reino Unido. "Sencillamente, no podemos seguir así”, dijo este miércoles Frost ante la Cámara de los Lores, al presentar las demandas británicas. "Creemos que debemos acordar rápidamente una moratoria” con la UE sobre su aplicación, agregó.
Irlanda, por su parte, sostuvo que analizará cuidadosamente las propuestas británicas que buscan reducir las fricciones comerciales, pero advirtió que cualquier salida debe ceñirse al marco del acuerdo logrado el año pasado. Simon Coveney, ministro de Exteriores irlandés, dijo que Dublín seguirá animando a Londres "a trabajar en conjunto con la UE en busca de soluciones realistas".
El Reino Unido abandonó formalmente el mercado único europeo y la unión aduanera el pasado 1 de enero.
https://www.dw.com/es/ue-descarta-renegociar-protocolo-sobre-irlanda-del-norte/a-58582803