El imperio estadounidense comienza a desmoronarse
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Escrito por Eric Zuesse
Para entender por qué, primero es necesario explicar la naturaleza del imperialismo y, por lo tanto, de todos los imperios (especialmente porque casi nadie sabe sobre esto):
Mientras que una dictadura meramente doméstica no es un peligro para otras naciones, una dictadura internacional, o “imperio”, es un peligro para otras naciones, porque cada imperio (es decir, cada uno de los individuos que realmente lo controlan) anhela aumentar o expandir su ( su) control, y porque este anhelo imperialista es o debe ser parte de la definición misma de “imperio” porque todo imperio se construye de esa manera (deseo insaciable de crecimiento), y también porque todo imperio se encamina a la extinción en la medida en que que renuncie a esta aspiración y abandone cualquier área que antes controlaba.
La diferencia entre el régimen de Franco en España y el régimen de Hitler en Alemania, que requirió una Guerra Mundial (específicamente la Segunda Guerra Mundial) para que otras naciones se protegieran del fascismo de Hitler pero no del fascismo de Franco, fue precisamente que el de Hitler fue imperialista y la de Franco no lo era.
Si Hitler, Hirohito y Mussolini no hubieran sido imperialistas, entonces no habría habido la Segunda Guerra Mundial. (El público de todas las naciones se oponía a entrar en guerra contra los fascistas imperialistas pero, en última instancia, solo los tontos más rígidos podían seguir negando que la única alternativa a la guerra contra los fascistas imperialistas sería rendirse ante ellos, y así llegó la Segunda Guerra Mundial. Aislacionismo y predicar la 'paz' frente a los imperialistas es una tontería miope. Esa tontería termina siendo invadido: mediante la subversión, las sanciones, el golpe y/o la acción militar.) No puede haber paz con un imperio, a menos que sea uno caducado. Los imperios son los motores mismos de la guerra y de una guerra casi constante.
A partir del 25 de julio de 1945, Estados Unidos se volvió imperialista —adoptó, de hecho, el objetivo de tomar el control del mundo entero— cuando su nuevo presidente, Harry S. Truman, decidió aceptar el consejo de su héroe, el general Dwight Eisenhower (apoyado por el imperialista británico Winston Churchill) para que Estados Unidos se convirtiera no solo en un imperio sino en el ÚNICO imperio (que Churchill esperaba que la nación de Churchill, el Reino Unido, controlaría en secreto tras bambalinas) y tomaría el control del mundo entero, pero especialmente ganaría la Unión Soviética, y así comenzó la “Guerra Fría” que iba a ser (así se le hizo creer al tonto de Truman) 'entre comunismo=dictadura versus capitalismo=democracia' y luego fue instalada permanentemente por el sucesor inmediato de Truman, el presidente Eisenhower. Esos dos presidentes en realidad crearon el complejo militar-industrial (MIC) o el gobierno de los EE. UU. que sería controlado por las corporaciones más grandes (como Lockheed) cuyo mercado principal o completo sería el gobierno de los EE. UU. y sus naciones vasallas o 'aliados' ( como Alemania, Japón, Corea del Sur y la totalidad del antiguo Imperio Británico), que serían los gobiernos clientes de los fabricantes de armas estadounidenses y aliados, o imperiales. Y, cuando los mayores fabricantes de armas controlan al Gobierno, en lugar de que el Gobierno controle a los mayores fabricantes de armas, eso no es meramente capitalismo, sino capitalismo dictatorial: es “fascismo”. De hecho: es el fascismo imperialista, el tipo de gobierno más peligroso que existe en la era moderna.
Lo que Churchill denominó en 1946 "la relación especial" (el cordón umbilical que conecta a los EE. UU. con el Reino Unido) en realidad había sido inventado por el magnate británico Cecil Rhodes, en privado, en 1877, antes de que Rhodes lo institucionalizara en su testamento tras su muerte en 1902. Uno de sus amigos y seguidores fue el entonces joven Winston Churchill.
Independientemente de lo que se pueda decir de Rhodes, fue extraordinariamente profético y extraordinariamente efectivo. (Igualmente, es el seguidor de Rhodes en la actualidad, George Soros, quien cita al filósofo Karl Popper pero actúa como Cecil Rhodes y lo canaliza en su lugar). Sin embargo, ahora, después del enorme éxito de la operación de Rhodes, que comenzó el 25 de julio de 1945, está haciendo apuestas desesperadas para continuar con el control, apuestas que son efectivas sólo en un sentido a corto plazo, porque la pura corrupción en su interior lo está pudriendo tanto como para derribarlo. Y eso es lo que está pasando. Reino Unido/EE.UU. La operación se encuentra ahora en su fase de declive y está respondiendo de manera más desesperada y destructiva a medida que ese declive se vuelve cada vez más claro. Su arrogancia está ejerciendo tanta presión sobre sus naciones vasallas como para forzar cada vez más la ruptura de "La Alianza Occidental": (Reino Unido)/EE.UU. y países aliados. Sin embargo, al mismo tiempo, el Reino Unido/EE.UU. La alianza está haciendo todo lo posible para atraer a algunas de sus naciones vasallas, como Japón, Corea del Sur, Finlandia y Suecia, aún más estrechamente al redil. Sin embargo, cualquier éxito en ese sentido tendrá un costo mayor para el Reino Unido y los EE. UU. imperio de lo que ha sido en el pasado. Para la mayoría de los observadores, la decadencia y caída de “Occidente” es ahora al menos tan evidente como lo había sido durante la encarnación romana; y si el Reino Unido/EE.UU. persistirá ahora, el resultado será aún más catastrófico que lo que les sucedió a los imperios de Alemania, Italia y Japón de la Segunda Guerra Mundial. Será incluso más feo que la Segunda Guerra Mundial.
El 3 de febrero, titulé “RT: Las naciones de la OTAN comienzan a hablar públicamente sobre la dictadura internacional del gobierno de EE. UU.” y comenté lo sorprendente que era que en esa fecha, tanto Turquía como Hungría insultaran públicamente al gobierno de EE. UU. Tal audacia e independencia de dos de las únicas naciones vasallas del imperio que quedan en la era actual (o al menos lo habían sido, hasta ese momento) no tiene precedentes históricos. Cómo la dictadura estadounidense podrá continuar llamándose a sí misma una “democracia” después de haber sido declarada simultáneamente por dos de sus naciones vasallas como una dictadura arrogante e intimidatoria, parece difícil de comprender. Tal vez incluso haga que otras naciones vasallas de la dictadura, como Japón, Corea del Sur, Finlandia y Suecia, tengan dudas sobre acercarse aún más de lo que ya están.
El gobierno de Estados Unidos está en el camino de la guerra y lo ha estado desde 1945, en nombre de la "libertad, la democracia y los derechos humanos", pero mintiendo hasta el final y ahora acercándose demasiado al precipicio de la Tercera Guerra Mundial. ¿Cuántos de sus 'aliados' se quedarán con él para ese fin?
https://southfront.org/the-u-s-empire-is-starting-to-fall-apart/